Deficiencias nutricionales comunes con problemas digestivos

Cuando enfrentamos problemas en el complejo sistema digestivo, las deficiencias nutricionales pueden convertirse en una preocupación significativa. Hoy vamos a mirar algunas de las deficiencias nutricionales más comunes que afectan a aquellos con problemas digestivos y cómo abordarlas para mejorar la calidad de vida.

¿Cuándo hay peligro de sufrir deficiencias nutricionales?

Dietas restrictivas: Aquellas personas que siguen dietas extremadamente restrictivas, como dietas o regímenes muy limitados en grupos alimenticios, pueden estar en riesgo de no obtener todos los nutrientes necesarios para mantener la salud. Esto también puede ocurrir cuando tenemos que limitar nuestra dieta por enfermedad.

Embarazo y Lactancia: Las mujeres embarazadas y lactantes tienen necesidades nutricionales aumentadas. La falta de ciertos nutrientes durante este período puede tener consecuencias para la madre y el desarrollo del bebé.

Medicamentos: Algunos medicamentos pueden interferir con la absorción de ciertos nutrientes o aumentar las necesidades de otros. Por ejemplo, los inhibidores de la acidez estomacal pueden afectar la absorción de vitamina B12.

Condiciones de salud crónicas: Algunas condiciones médicas crónicas, como enfermedades gastrointestinales, enfermedades renales, diabetes, enfermedades autoinmunes y trastornos alimentarios, pueden interferir con la absorción adecuada de nutrientes y aumentar el riesgo de deficiencias.

Condiciones de salud digestiva:

• Enfermedad Inflamatoria Intestinal (EII): La enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa son formas de EII que pueden afectar todo el tracto gastrointestinal, causando inflamación crónica. Esto puede interferir con la absorción de nutrientes y aumentar el riesgo de deficiencias.

• Síndrome del intestino irritable (SII): Aunque el colon irritable no causa daño estructural en el intestino, los síntomas como diarrea o estreñimiento pueden afectar la absorción de nutrientes. Además, las intolerancias alimentarias comunes en personas con colon irritable pueden contribuir a deficiencias nutricionales.

• Enfermedad celíaca: La enfermedad celíaca es una intolerancia al gluten que causa daño en el revestimiento del intestino delgado. Esto puede llevar a la malabsorción de nutrientes esenciales, como hierro, calcio, y vitaminas liposolubles.

• Post cirugía gastrointestinal: Las personas que han pasado por cirugías gastrointestinales, como la resección del intestino, pueden tener áreas reducidas para la absorción de nutrientes, lo que aumenta el riesgo de deficiencias.

• Infecciones gastrointestinales crónicas: Infecciones persistentes en el tracto gastrointestinal pueden afectar la absorción adecuada de nutrientes, especialmente si hay daño en la mucosa intestinal.

• Síndrome de malabsorción: Condiciones como el síndrome de malabsorción pueden estar asociadas con problemas digestivos que interfieren con la absorción de grasas, vitaminas liposolubles y otros nutrientes.

• Diverticulitis: La inflamación de los divertículos en el colon puede afectar la absorción de nutrientes y aumentar el riesgo de deficiencias.

Las deficiencias nutricionales más comunes cuando hay problemas digestivos

Deficiencias de hierro:

La pérdida de sangre gastrointestinal, ya sea provocada por condiciones como la enfermedad inflamatoria intestinal o úlceras, puede ser un precursor crucial de deficiencias de hierro. Esta situación puede desencadenar anemia, una afección que se manifiesta con síntomas como fatiga persistente, debilidad y palidez en la piel.

La anemia por deficiencia de hierro es una consecuencia directa de la reducción en los niveles de hemoglobina, la molécula responsable de transportar el oxígeno a través del torrente sanguíneo. La pérdida continua de sangre puede comprometer significativamente la capacidad del cuerpo para mantener niveles adecuados de hierro.

Insuficiencia de vitamina B12:

Condiciones como la enfermedad de Crohn, la enfermedad celíaca y la gastrectomía pueden afectar la absorción de vitamina B12 en el intestino delgado. La deficiencia de vitamina B12 puede desencadenar una serie de consecuencias, entre las que destaca la anemia megaloblástica, una afección caracterizada por la producción anormal de glóbulos rojos, lo que resulta en células sanguíneas más grandes y menos eficientes. Además, los problemas neurológicos pueden manifestarse, destacando la importancia crítica de la vitamina B12 para el sistema nervioso.

Déficit de vitamina D:

La malabsorción de grasas, común en condiciones como la enfermedad celíaca y la enfermedad inflamatoria intestinal, puede afectar la absorción de vitamina D. La deficiencia de vitamina D puede tener consecuencias en la salud ósea y el sistema inmunológico. La exposición al sol y los suplementos son estrategias clave para abordar este déficit.

 Malabsorción de grasas y vitaminas liposolubles:

Condiciones como la enfermedad de Crohn y la cistectomía pueden afectar la absorción de grasas y vitaminas liposolubles (A, D, E, K). La suplementación de estas vitaminas y la atención a la dieta son esenciales para prevenir deficiencias.

Anemia por déficit de acido fólico:

La enfermedad inflamatoria intestinal y la cirugía gástrica pueden aumentar el riesgo de deficiencia de ácido fólico, causando anemia y fatiga. Los suplementos y la inclusión de alimentos ricos en folato son estrategias para corregir esta deficiencia.

Desbalance de probióticos y prebióticos:

Las alteraciones en la microbiota intestinal, comunes en condiciones como el síndrome del intestino irritable, pueden afectar la absorción de nutrientes. Mantener un equilibrio saludable de probióticos y prebióticos a través de la dieta y los suplementos puede ser beneficioso.

Falta de enzimas digestivas:

La insuficiencia pancreática o problemas enzimáticos pueden afectar la descomposición adecuada de los alimentos, llevando a deficiencias nutricionales. Los suplementos de enzimas digestivas pueden ser recetados para mejorar la digestión.

Falta de calcio:

La enfermedad inflamatoria intestinal y la intolerancia a la lactosa pueden contribuir a la falta de calcio. Esto puede afectar la salud ósea y aumentar el riesgo de osteoporosis. Los suplementos de calcio y alimentos ricos en calcio, como vegetales de hojas verdes, son recomendaciones comunes.

Manejo de las deficiencias nutricionales

La primera y más crucial medida es buscar orientación médica para poder terminar tus deficiencias. Se podrán realizar pruebas específicas para identificar deficiencias y diseñar un plan de suplementos o cambios en la dieta. La suplementación puede ser necesaria para corregir deficiencias. Vitaminas, minerales y enzimas digestivas específicas pueden ser recomendadas según las necesidades individuales.

Adoptar una dieta equilibrada y adaptada a las necesidades específicas de cada condición es de gran importancia. Alimentos ricos en nutrientes, fácilmente digeribles y que no desencadenen problemas digestivos son fundamentales.

Las deficiencias nutricionales en personas con problemas digestivos son una realidad, pero con el enfoque adecuado, se pueden abordar de manera efectiva. La clave reside en la comprensión profunda de la condición individual. Un enfoque integral para controlar la inflamación y mejorar la salud intestinal puede contribuir a una mejor absorción de nutrientes. Recuerda, la salud digestiva es la base de nuestro bienestar, y cuidarla es un paso vital hacia una vida plena y saludable.