Las deposiciones de una persona con colon irritable

Si estás notando cambios en tus heces, es muy importante que tengas en cuenta que esto podría ser una señal del colon irritable o síndrome del intestino irritable. En este post te explicaré la importancia de analizar tus heces y qué hacer si encuentras tus desechos fuera de lo normal para ti.

El síndrome del intestino irritable puede causar retraso o aceleración en el movimiento intestinal y, en consecuencia, cambios en la frecuencia, forma o consistencia de las heces.

Se considera la existencia de cuatro subtipos de esta disfunción, en función de la consistencia de las heces: colon irritable con estreñimiento, colon irritable con diarrea, formas mixtas y formas no clasificables.

El síndrome del intestino irritable se conoce comúnmente como "colitis nerviosa", "colitis espástica", "colon irritable" o "enfermedad del intestino funcional". En los países industriales, se estima que aproximadamente del 10% al 20% de la población padece esta enfermedad. Las mujeres se ven afectadas con el doble de frecuencia que los hombres. La enfermedad se desencadena normalmente antes de los 45 años.

Las manifestaciones más comunes en aquellos que tienen colon irritable son dolor o malestar abdominal, asociado a diarrea, estreñimiento o ambos. Por regla general, el dolor o malestar abdominal debe estar asociado a dos de los tres síntomas siguientes: Deposiciones que se producen con mayor o menor frecuencia de lo habitual; heces menos consistentes y más acuosas o, por el contrario, heces más duras de lo habitual; sentir alivio con la evacuación.

El síndrome del intestino irritable también puede causar diarrea, con sensación de urgencia defecatoria; estreñimiento; sensación de evacuación incompleta; presencia de mucosidad en las heces y flatulencia (eliminación de gases).

El dolor abdominal a menudo se desencadena al comer y se alivia después de defecar o expulsar gases. El dolor generalmente se localiza en la parte inferior del abdomen. También puede ocurrir distensión abdominal y sensación de gas.

Los pacientes con colon irritable suelen tener varios de estos síntomas durante largos períodos de tiempo. Los síntomas pueden empeorar por el estrés y la ansiedad. La presencia de sangre en las heces, la pérdida de peso o la fiebre deben hacer sospechar un diagnóstico diferente al síndrome del intestino irritable.

Causas del colon irritable

• Contracciones exageradas después de comer alimentos irritantes o en respuesta al estrés
• Hipersensibilidad de los receptores nerviosos en la pared intestinal a la falta de oxígeno, distensión, contenido fecal, infección y cambios psicológicos
• Niveles elevados de neurotransmisores (como la serotonina, por ejemplo) en la sangre y el intestino grueso
• Infecciones y procesos inflamatorios
• Depresion y ansiedad

Diagnóstico del colon irritable

Se basa en la presencia de dolor o malestar abdominal de más de 6 meses de evolución, en ausencia de otra enfermedad o lesión que pueda explicar este dolor. El estudio de heces, análisis de sangre, colonoscopia, son algunas de las pruebas que pueden ser necesarias. La colonoscopia es importante a partir de los 50 años para la detección del cáncer de colon.

Causas del colon irritable

Las paredes de los intestinos están formadas por músculos que se contraen y relajan durante el proceso digestivo. En el síndrome del intestino irritable, las contracciones pueden ser más fuertes y pueden durar más de lo normal, causando dolor y malestar, trastorno de evacuación, con heces blandas y delgadas, sensación de evacuación incompleta. También puede ser que suceda lo contrario, con contracciones intestinales más débiles de lo normal, lo que lleva al estreñimiento. En las personas con Síndrome de Intestino Irritable, la actividad intestinal produce dolor, a diferencia de las personas normales en las que los movimientos del tubo digestivo se vuelven prácticamente imperceptibles. Esta condición se llama hipersensibilidad visceral.

Tratamiento convencional del colon irritable

Para el dolor: El tratamiento convencional del colon irritable es con antiespasmódicos. Algunos pacientes responden bien al uso de antidepresivos tricíclicos, si la causa es psicológica; otros, a los antiinflamatorios y, en los casos más graves, a la morfina y sus derivados.

Para la diarrea: Los medicamentos que aumentan la consistencia de las heces y reducen la frecuencia de las deposiciones suelen tener buenos resultados. Se pueden conseguir libremente en farmacias. Los casos más graves a veces se tratan con antibióticos durante un tiempo breve, solo con orden médica.

Para el estreñimiento: una dieta alta en fibra y laxantes osmóticos, como la leche de magnesia y la lactulosa, ayudan a aliviar los síntomas. Además de estos, también son útiles los fármacos capaces de acelerar el tránsito intestinal y disminuir la consistencia de las heces.

Recomendaciones para tratar el colon irritable naturalmente

• Crear tu propia lista de alimentos que pueden estar asociados a la aparición de tus síntomas y evitarlos
• Adoptar una dieta apta para el colon irritable. Tener cuidado con verduras que aumentan la producción de gases, como el repollo, la coliflor, los frijoles, entre otros
• Evitar bebidas alcohólicas y que contengan cafeína
• Procurar no mascar chicle ni comer dulces que contengan sorbitol
• Mantener una rutina de ejercicio diario
• No fumar
• No subestimes el beneficio que la psicoterapia y otras técnicas terapéuticas (técnicas de relajación, por ejemplo) que pueden aportar a las personas con el síndrome

Preguntas frecuentes sobre el colon irritable

¿Puede el síndrome del intestino irritable causar cáncer colorrectal?

No. El colon irritable no es maligno, no provoca ningún tipo de lesiones en el intestino y no aumenta el riesgo de evolucionar al cáncer colorrectal ni a otras patologías más graves relacionadas con el intestino.

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